Mariano Pernía, tandilense de 36 años, ya las vivió todas en el fútbol: jugó en un grande de Argentina como Independiente, emigró a España, fue figura y hasta jugó el mundial de Alemania 2006 con los colores de la Selección ibérica.

Sin embargo un buen día, tentado por su papá Vicente y por su hermano Leonel, ambos ex futbolistas y figuras del automovilismo nacional, el ex defensor del Atlético de Madrid se calzó el buzo, comenzó a probar y se enamoró perdidamente del deporte motor, hoy por hoy su única actividad.
Sin embargo, luego de un sobrio paso por el TC Pista Mouras y actualmente en la Clase 2 del TN con un Clío, Pernía fue el protagonista de un fuerte rumor que finalmente fue desmentido por el propio volante de Tandil: su regreso a la actividad profesional del fútbol.
¿A qué se deben los rumores? El club Tristán Suárez, que milita en la Primera B Metropolitana lo convocó a través del DT Eduardo Pizzo a entrenarse con el plantel profesional. ¿Con qué fines? MOTIVAL AL EQUIPO.
A modo de consejero espiritual, transmisor de su experiencia e impulsor de buenas vibras para el plantel del Lechero, Pernía hace sus aportes en el club del Sur del Gran Buenos Aires, aquel al cual Diego Maradona le tiene una gran estima.
"Mi etapa como futbolista ya está cerrada. La verdad que el fútbol me dio más de lo que yo pensaba y siempre le estaré agradecido a todos los que confiaron en mi. Hoy mi actividad es otra, el automovilismo y mis tiempos y mis compromisos están volcados en esto. Estoy en una etapa de aprendizaje como corredor y qué mejor en el Turismo Nacional para seguir la tradición familiar que empezó mi papá hace casi 30 años. En Tristán Suárez lo que hago es aconsejar al cuerpo técnico y a los jugadores, dar una mano en lo que puedo a nivel liderazgo, pero no me entreno para volver al fútbol, sino para mantener mi estado físico para seguir estando en el automovilismo", confió hace algunas semanas a este blog.