José Luis Alonso tenía un sueño allá por 1984: que alguno de sus hijos se subiera a un auto de carrera y llegara muy lejos. Su hija mayor,
Lorena, de 8 años, intentó manejar la unidad que le había construido su padre –mecánico de profesión- y tras varias vuelas por los caminos de Oviedo, en Asturias, se estrelló al perder el control y nunca más quiso subirse a un coche de karting. Le quedaba el nene,
Fernando, de 3 años, quien accedió al deseo de su padre y, sin ni siquiera llegar sus pies a los pedales, empezó a trazar su ilusión en el automovilismo.
El
Nano, como lo llaman sus familiares y amigos, ahora es uno de los pilotos más exitosos y mejor pago de la Fórmula Uno. Su madre, Ana, lo trajo al mundo el
29 de julio de 1981 y durante los primeros años de vida del pequeño Fernando vivían en una casa de 70 metros cuadrados en un vecindario humilde de Oviedo, España. Ella era empleada en una tienda llamada
“Galerías Preciado”, y José Luis, su esposo, tenía un taller mecánico.
Y como el sueño de Alonso padre debía hacerse realidad, cuando el Nano fue creciendo compitió en categorías zonales y nacionales de karting y fue campeón de varias, como la de Asturias en 1988 en donde ganó todas las carreras.
Resulta extraño que un piloto de
Fórmula Uno tenga orígenes humildes, en donde el dinero no sobraba, porque la mayoría de los corredores de esta categoría han tenido un buen pasar económico desde niños, aunque hayan realizado sus esfuerzos.
El Nano conductor ya fue presentado, todos saben quién es, sus logros, su bicampeonato 2005/2006 de F1 con
Renault, sus inicios en Minardi y su polémico paso por MC Laren. Ahora falta el Nano persona:
“De niño no hablaba mucho, era tímido, callado, pero arriba del coche lo daba todo y a veces le pedía un poco de tranquilidad”, recuerda a menudo su padre.
Sus amigos lo consideran buena persona, y que a pesar de su fama y su gloria deportiva, se ha mantenido humilde como siempre, apegado a los suyos, aunque no los vea frecuentemente por los viajes y las competencias.
La tranquilidad y el bajo perfil lo llevaron a tratar de sostener una relación con MC Laren y sus integrantes que en 2007 se hizo insostenible. Su discrepancia con Lewis Hamilton, sumado a los escándalos de espionaje de la escudería hicieron que en 2008 Alonso fichara de nuevo para Renault. Ese año firmó un convenio con Ferrari para que en 2011 se sume a la marca italiana, y tendría otro record en su haber, dado que no se dio en tanto tiempo que un piloto pasara a escuderías rivales y poderosas en pocos años. Antes lo había logrado
Kimmi Raikkonen, cuando en 2007 pasó de
Mc Laren a Ferrari.
Durante mucho tiempo Alonso tuvo otro record, que fue el haber sido el campeón más joven de F1 con 24 años, algo que superó su archirrival
Lewis Hamilton.
El destino quiso que fuera Fernando y no Lorena, quien se dedicara de lleno al automovilismo. Actualmente ella es médica y obviamente ambos eligieron caminos muy distintos. Su padre, José Luis estará orgulloso de ambos.
JOVEN, EXITOSO Y PERSEVERANTE.
Alonso llegó de la mano del catalán Genís Marcó al automovilismo grande a los 11 años. corrió En Mundial de Karts, en Fórmula Nissan (campeón 1999) hasta que llegó a la Fórmula 3000. Allí sus buenos resultados hicieron que Bernie Ecclestone le propusiera integrarse a algún equipo, y la escuadra que lo recibió fue Minardi, en los años post Mazzacane. Sin haber corrido en la GP 2, el asturiano cumplió su sueño de debutar en la máxima del automovilismo mundial, y en 2005 y 2006 el más importante: ser campeón del mundo.por Mariela Delay
