El joven tenía 18 años quedó incosciente y salió de la pista. Inemdiatamente fue auxiliado y llevado en una avión hacia el Hospital Royal London, donde los médicos no pudieron hacer nada para salvarlo.
Su deceso produjo gran controvesia en Gran Bretaña por la construcción de los coches de F2, por parte de Frank Wiliams, ya que los allegados a Surtees pusieron en duda la confiabilidad de los mismos.
Tenía todo un camino por recorrer, y uno de sus sueños era emular a su padre, quien fue monarca de F1 y cuadruple campeón del mundo de Moto GP, y hasta el momento es el único piloto que pudo coronarse mundialmente en dos disciplinas distintas.
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