Para sus compatriotas y el mundo automovilístico fue todo un suceso, dado que el 25 de julio último casi pierde la vida en la clasificación del GP de Hungría, cuando un resorte del auto de Rubens Barrichello le impactó en su casco, por lo que estuvo varios días en terapia intensiva, y continuó el tratamiento médico en su casa.
Asimismo, el brasileño corrió con su buzo de Ferrari y le colocó una protección extra a su casco, y su actividad fue supervisada por su medico personal.
Dadas las malas condiciones climáticas no pudo seguir con la exhibición en Granja Vianna, pero prometió volver a participar en un kartódromo, y la proxima será en el marco del campeonato de Karting, con fecha a confirmar ( sería en noviembre) en Florianópolis.
Felipe sueña con regresar lo más pronto posible a su hábitat natural: el circo de la Fórmula Uno, pero esta vez lo esperará un bicampeón mundial: Fernando Alonso.
FOTO : REUTERS
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